En Beasain y todo el Goierri ya no tendrán el problema que el año pasado llevó a la organización a tomar la dura pero a la postre acertada decisión de suspender ehunmilak que apenas había recorrido 50 kilómetros de los 168 a recorrer por los participantes y g2h que tan solo recorrió 18 de los 88.

Sabido es que la meteorología por estas latitudes en esta época estival es complicada y que muchas veces descarga toda su ira sobre el territorio poniendo en peligro la celebración de un evento de esta índole.

La organización, convaleciente aun tras la IX. edición, ha decidido no arriesgar en la celebración de su X. edición y han contactado con el comité organizador de las Olimpiadas celebradas en Pekín en el año 2008 donde ya utilizaron esta innovadora técnica.

La operativa aún está por definir pero parece sencilla. Una aeronave de reducidas dimensiones y equipada con un equipo de fumigación, despegará desde algún aeródromo cercano y volará hasta las inmediaciones de la comarca del Goierri entre los Parques Naturales de Aralar y Aizkorri-Aratz. Sobrevolará las nubes medias o altas que se encuentran a unos 2.000 o 3.000 metros y cuya temperatura es más baja de 0º, y lanza yoduro de plata.

Posteriormente y cuando tras la realización de la prueba vuelva a llover de forma natural, el yoduro de plata caerá junto a las gotas de agua que, a pesar de ser una sustancia química, no supondrá ningún peligro para el ser humano.